Hoy se requiere una energía equivalente a 210 millones de barriles de petróleo. De toda esta energía casi la mitad se gasta en la industria, 20% en transporte; mas de 30% para la iluminación, refrigeración, calefacción, transmisión y recepción de información, uso doméstico, comercios y edificios públicos.
El petróleo y el gas son actualmente energéticos de gran trascendencia en el mundo contemporáneo, por lo que desde hace décadas se libra una verdadera lucha por el control de sus reservas.
El resultado son conflictos armados, como los que suceden en Medio Oriente y que han desestabilizado la región por mucho tiempo, aunque pocas veces se reconozca que son guerras por el control de los energéticos. Un ejemplo de esto es Estados unidos pues consume 25% del crudo mundial y sólo produce 12%; por ello requiere garantizar su provisión y, ante situaciones que considera peligrosas para ello, actúa.
El petróleo y el gas son actualmente energéticos de gran trascendencia en el mundo contemporáneo, por lo que desde hace décadas se libra una verdadera lucha por el control de sus reservas.
El resultado son conflictos armados, como los que suceden en Medio Oriente y que han desestabilizado la región por mucho tiempo, aunque pocas veces se reconozca que son guerras por el control de los energéticos. Un ejemplo de esto es Estados unidos pues consume 25% del crudo mundial y sólo produce 12%; por ello requiere garantizar su provisión y, ante situaciones que considera peligrosas para ello, actúa.
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